Las exportaciones rusas cayeron casi un 30% en un año y las sanciones estadounidenses han bloqueado su flota de petroleros.

Según Reuters, el volumen total de las exportaciones rusas disminuyó un 28,3% hasta los 425.100 millones de dólares. La caída más notable se produjo en la oferta europea, que fue del 68% hasta los 84.900 millones de dólares. Por otro lado, las exportaciones a Asia aumentaron un 5,6% hasta 306,6 mil millones de dólares. La participación de esta región en las exportaciones rusas ha aumentado significativamente: del 49% en 2022 al 72% en 2023.

Mientras tanto, según Bloomberg, una gran parte de la enorme flota de petroleros que Rusia utiliza para entregar petróleo está encallada bajo la presión de las sanciones estadounidenses. Esto indica que medidas más estrictas por parte de los reguladores occidentales pueden comenzar a tener un impacto tangible en Moscú. Así, de los 50 petroleros sancionados desde el 10 de octubre, 21 aún tienen que cargar su carga. Esto provocó un fuerte aumento del coste del transporte y una disminución de los precios del petróleo ruso.