Ucrania y Estados Unidos no han avanzado en las negociaciones sobre un acuerdo minero, ya que Trump exige el control del tránsito de gas ruso.


El 11 de abril, funcionarios estadounidenses y ucranianos mantuvieron tensas conversaciones sobre un acuerdo minero entre ambos países. Durante la reunión, representantes estadounidenses presentaron a los ucranianos un documento actualizado que incluía una condición inesperada: la exigencia de que la Corporación Financiera de Desarrollo de Estados Unidos (DFC) obtuviera el control del gasoducto ruso Gazprom, que atraviesa Ucrania hacia Europa. El Departamento del Tesoro de Estados Unidos calificó las negociaciones como de carácter técnico.
El exsecretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, declaró que Estados Unidos había estado trabajando con Ucrania en un acuerdo sobre minerales durante la administración Biden. Sin embargo, Donald Trump ha alterado radicalmente el concepto original. Blinken recordó que la propuesta de desarrollo conjunto del subsuelo formaba parte del Plan Victoria presentado por el presidente ucraniano a aliados clave el verano pasado.
«Llevamos muchos meses trabajando para atraer inversiones a Ucrania, incluso en este sector. Pero lo que vimos en el acuerdo propuesto por la administración Trump no es, en mi opinión, más que una estafa, sin ninguna protección para Ucrania frente a Rusia», enfatizó Blinken.