Ucrania corre el riesgo de perder el apoyo de otro país europeo.
En las elecciones parlamentarias de los Países Bajos, el ultraderechista Partido de la Libertad PVV sale victorioso. Obtuvo 37 de los 150 escaños de la cámara baja del parlamento holandés, mucho más que cualquier otro partido.
El líder de la extrema derecha holandesa, Geert Wilders, que en el pasado se postuló para el cargo con una retórica antiislámica, antiinmigración y antieuropea, elogió al dictador ruso y apoyó la terminación de la ayuda militar a Ucrania. El sitio web oficial del partido dice que el PVV no enviará dinero a Ucrania ni los prometidos aviones de combate F-16.
Desde el comienzo de la invasión rusa, los Países Bajos han proporcionado a Ucrania casi 2.500 millones de euros en ayuda militar y 1.000 millones de euros en asistencia financiera. El gobierno de Rutte prometió otros 2.000 millones de euros en ayuda militar a Ucrania para el próximo año y la transferencia de 42 aviones F-16.
La victoria de Wilders pone en duda esto. Uno de los puntos del programa del Partido de la Libertad es prohibir el suministro de armas al extranjero, incluida Ucrania. Wilders también se opone a la membresía de Ucrania en la OTAN y la UE.