Ucrania continúa con sus ataques exitosos contra las instalaciones militares del enemigo.
En la tarde del 8 de junio, drones atacaron el remolcador ruso Inzhener Smirnov y una barcaza, la Sección 179, en la bahía de Taganrog en el mar de Azov.
Además, las fuerzas ucranianas atacaron complejos de misiles rusos S-300/S-400 en la Crimea temporalmente ocupada. Según el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania, una división de misiles antiaéreos S-400 cerca de Dzhankoy y dos divisiones S-300 en las regiones de Chornomorskyi y Eupatoria fueron atacadas. Los rusos no interceptaron ni un solo misil disparado. Después del ataque, el ejército ucraniano registró el apagado inmediato de los radares de los complejos rusos afectados.
Además, la inteligencia ucraniana aclaró información previa sobre el ataque al caza multipropósito Su-57 del enemigo en el territorio de la base aérea de Akhtubinsk en la región de Astrakhan de la Federación Rusa. Según el portavoz del GUR, Andriy Yusov, dos aviones podrían haber resultado dañados, pero la información está siendo verificada.
Además, el 9 de junio, un avión militar ucraniano alcanzó por primera vez un objetivo en territorio ruso y dañó el puesto de mando en la zona de Belgorod.