Se ha abierto un nuevo gasoducto alternativo ruso en Europa.
El nuevo gasoducto entre Bulgaria y Grecia entró en funcionamiento el 1 de octubre. El interconector IGB cambiará las reglas del juego en el mercado energético europeo y proporcionará independencia del gas ruso, dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. El proyecto de 240 millones de euros conecta Bulgaria con el Corredor de Gas del Sur y el Gasoducto Transadriático (TAP). El nuevo gasoducto permitirá suministrar gas de varias fuentes a países del sudeste y centro de Europa, incluidos Moldavia y Ucrania. La longitud del oleoducto IGB es de 182 km, incluidos 31 km en territorio griego, con una capacidad de volumen de tres mil millones de metros cúbicos por año. La capacidad se puede aumentar a cinco mil millones de metros cúbicos mediante la construcción de una estación compresora en territorio griego, lo que también garantizará la capacidad operativa inversa. Además, se transportarán mil millones de metros cúbicos de gas de Azerbaiyán a través del gasoducto a Bulgaria.