Los gigantes mundiales del petróleo y el gas están incrementando sus actividades de exploración en lugar de invertir en energías renovables.


Grandes empresas como BP, Chevron, ExxonMobil, Shell y TotalEnergies están intensificando sus esfuerzos de exploración, anticipando que la demanda de combustibles fósiles persistirá durante décadas. Los líderes de las compañías han anunciado una transición de las energías renovables a la expansión de su base de recursos mediante la exploración y la perforación de nuevos pozos.
Los analistas pronostican que, en un escenario de transición verde más lenta, las necesidades mundiales de petróleo crecerán aproximadamente un 5% anual desde mediados de la década de 2030, con más de 100 mil millones de barriles que deben descubrirse para 2050. El año pasado, se descubrieron alrededor de cinco mil millones de barriles en todo el mundo, lo que representa el 19% de la producción anual, lo que pone de relieve un importante déficit potencial.
BP ha realizado el cambio más drástico: tras invertir 15 mil millones de dólares en proyectos verdes desde 2021, la compañía ahora planea aumentar la inversión en petróleo y gas, perforar 40 pozos de exploración en tres años y reportar el mayor descubrimiento en 25 años frente a las costas de Brasil. A pesar de este cambio, la inversión industrial en exploración sigue estando muy por debajo de los niveles máximos observados entre 2010 y 2015.