Los funcionarios británicos quieren un Rammstein económico para dañar la maquinaria de guerra de Putin.
Alicia Kearns, diputada del Parlamento de Gran Bretaña por el Partido Conservador, señala datos publicados por el economista jefe del Instituto de Finanzas Internacionales, Robin Brooks, que indican que las sanciones occidentales no han tenido el impacto esperado en la economía de la Federación Rusa.
“No hemos podido estrangular financieramente la maquinaria de guerra de Putin de manera adecuada, y debemos privarlo de la capacidad de financiar ataques contra civiles”, enfatizó Kearns. Por eso, según ella, es necesario movilizar a los gobiernos para coordinar acciones económicas y militares.
La idea de Kearns es realizar reuniones similares a las reuniones militares de Rammstein, donde los socios de Ucrania trabajarán juntos para socavar la capacidad financiera del estado agresor para continuar financiando la guerra contra Ucrania.