Las empresas de construcción reportaron expectativas positivas por primera vez desde septiembre de 2019 debido a un repunte estacional en la actividad y una creciente demanda de inversión para la construcción de viviendas:

el índice del sector finalmente se movió por encima de su nivel de equilibrio en abril, a 51,5, frente a 40,6 en marzo. Los encuestados esperaban un aumento en los volúmenes de construcción, el número de nuevos pedidos, compras de servicios de contratistas y compras de materias primas y suministros. Las empresas de todos los sectores esperan un aumento en sus precios de venta debido al aumento de los precios de las materias primas y los suministros. También informan que no tienen intenciones de expandir su fuerza laboral.