La UE y EE. UU. se preparan para intensificar las sanciones contra Rusia.


La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, discutió la coordinación de sanciones contra Rusia con el senador republicano estadounidense Lindsey Graham para intentar poner fin a la guerra. El senador estadounidense propone imponer aranceles del 500% a los países que compren petróleo, gas y uranio rusos. Simultáneamente, la UE prepara su decimoctavo paquete de sanciones estrictas, cuyo objetivo es socavar los ingresos energéticos de Rusia.
Mientras tanto, el líder de la mayoría republicana en el Senado estadounidense, John Thune, ha anunciado su disposición a comenzar a trabajar en el proyecto de ley de sanciones este mes.
Además, el presidente de la Cámara de Representantes estadounidense, el republicano Mike Johnson, ha respaldado firmemente la propuesta de Graham y ha enfatizado que muchos en el Congreso desean las sanciones más severas posibles contra Rusia. Graham destacó que las nuevas sanciones aislarían económicamente a Rusia si se niega a negociar «de buena fe» para poner fin a la guerra o si ataca de nuevo a Ucrania tras alcanzar un posible acuerdo de paz.
The Hill señaló que los senadores esperan la autorización del presidente estadounidense Trump para votar sobre las sanciones contra Rusia, pero los demócratas están perdiendo la paciencia.
«Los senadores de ambos partidos ya están cansados de la postura inconsistente de Trump respecto a Putin. Si Trump no le planta cara, el Senado lo hará», enfatizó el líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer.