La UE no tiene alternativas para sustituir el 8% de su gas que recibe de Rusia.
Según la comisaria europea Kadri Simson, si se reduce el consumo, la UE ahorrará otros 65 mil millones de metros cúbicos hasta marzo de 2024, pero no será posible reducir el consumo de gas en otro 15%, como se logró el año pasado. Tanto la industria como la población casi han agotado las posibilidades de seguir ahorrando.
En el primer semestre de 2023, la demanda de gas en la UE cayó en 30 mil millones de metros cúbicos. Así, para que las predicciones de Simson se hagan realidad, los europeos deben ahorrar en los meses más fríos, nada menos que el invierno del año pasado, que tuvo temperaturas récord.
Hasta ahora, el Centro Europeo Copérnico pronostica temperaturas superiores a lo normal en octubre y un clima generalmente templado en Europa occidental hasta finales de diciembre. Pero todavía se desconoce cómo será el tiempo en los meses tradicionalmente fríos de enero y febrero.
La UE anunció su intención de abandonar por completo la compra de combustibles fósiles en Rusia hasta 2027. Admitió que será imposible prescindir de los hidrocarburos rusos en los próximos tres o cuatro años.