La Academia de Ciencias de Rusia predice el colapso de la economía de petróleo y gas del Estado agresor.
Rusia tendrá que decir adiós a su estatus de «superpotencia energética». Al haber perdido el acceso a las tecnologías occidentales y a los mercados clave para la venta de materias primas, Rusia no podrá volver a sus volúmenes anteriores de exportaciones de hidrocarburos, predice el Instituto de Investigación Energética de la Academia de Ciencias de Rusia.
Se espera que en los próximos 25 años, la economía rusa pierda el 40% de sus exportaciones de combustibles y sus ingresos disminuyan casi un 65% para 2050. En 2021, se exportaron 821 millones de toneladas de petróleo, carbón y gas desde Rusia, para 2030, las exportaciones totales caerán a 583 millones de toneladas, para 2040 a 561 millones de toneladas y para 2050 a 486 millones de toneladas.
Las divisas disminuirán de 315 mil millones de dólares en 2021 a 146 mil millones de dólares en 2030. Los ingresos por exportaciones de combustible fueron uno de los principales factores de la recuperación económica de la Federación de Rusia. A finales de la década de 2010, las exportaciones representaban aproximadamente el 33% del PIB ruso, pero en las próximas décadas el complejo de combustibles y energía perderá su papel de locomotora de la economía y su contribución al PIB se quintuplicará.