Gran Bretaña y Francia se preparan para brindar defensa a largo plazo a Ucrania sin el apoyo de Estados Unidos, en lugar de enviar fuerzas de paz.


Funcionarios británicos y franceses que trabajan en planes para desplegar fuerzas de paz en Ucrania han debatido la necesidad de brindar defensa a largo plazo a Ucrania sin la participación de Estados Unidos. En particular, han cambiado sus prioridades: en lugar de desplegar tropas europeas para apoyar el alto el fuego, se centrarán en proporcionar defensa a largo plazo a Kyiv de forma independiente.
De hecho, existe una seria preocupación de que el presidente estadounidense abandone su papel de mediador si no logra convencer al presidente ruso. Por lo tanto, la principal prioridad es mantener el apoyo necesario a Ucrania, considerando que Estados Unidos seguirá proporcionando solo algunos recursos, incluyendo inteligencia.
Los funcionarios europeos también han coincidido en la necesidad de aumentar la presión económica sobre Rusia. En una reunión de ministros de Asuntos Exteriores en La Haya, los aliados europeos de Kyiv acordaron invitar al presidente Zelenski a la cumbre de la OTAN en junio. Su asistencia había sido puesta en duda previamente después de que Trump se manifestara en contra.