Estados Unidos y Ucrania han presentado sus respectivas propuestas y condiciones para poner fin a la guerra.


Estados Unidos y Ucrania, junto con sus aliados europeos, sugieren un alto el fuego total, y Kyiv insiste en la liberación de todos los prisioneros.
El borrador estadounidense contiene un lenguaje vago que afirma que Ucrania recibirá «garantías de seguridad fiables» de los países europeos y de los estados no europeos interesados. También sugiere que Ucrania abandone sus ambiciones de adhesión a la OTAN, pero no a la UE.
Ucrania busca garantías de seguridad , en particular de Estados Unidos, similares al Artículo 5 de la OTAN, aunque no hay consenso sobre su adhesión a la Alianzа.
Ucrania y sus aliados se niegan a aceptar restricciones al ejército ucraniano ni a la presencia, el armamento y las operaciones de fuerzas extranjeras amigas en Ucrania. Kyiv solo abordará los asuntos territoriales tras un alto el fuego total e indiscutible y el establecimiento de una línea de control.
Sin embargo, Estados Unidos propone el reconocimiento de iure del control de la Federación Rusa sobre Crimea y el control de facto sobre los demás territorios ocupados, a la vez que devuelve parte de la región de Járkov a Ucrania. Ambos documentos anticipan la devolución de la central nuclear de Zaporizhia a Ucrania con la participación de Estados Unidos (EE. UU. sugiere distribuir la electricidad entre ambas partes), así como la firma de un acuerdo minero entre Kyiv y Washington.
El plan estadounidense incluye el levantamiento de las sanciones contra la Federación Rusa y la cooperación política y económica con el país.
En cambio, Ucrania y sus aliados sugieren flexibilizar las sanciones solo tras lograr una paz estable y restablecerlas si se viola el acuerdo.
El plan estadounidense menciona vagamente la recuperación de Ucrania y una compensación financiera. Ucrania, por su parte, busca una compensación de Rusia, concretamente a través de los activos congelados del Banco Central Ruso en Europa.