Estados Unidos suministrará inicialmente nuevas armas a sus aliados, quienes posteriormente las transferirán a Ucrania.


La administración Trump planea redistribuir el suministro de armas, especialmente los sistemas de defensa aérea, para que los países que transfieran sus arsenales a Ucrania los reciban primero. Estados Unidos ya ha priorizado a Alemania sobre Suiza en la transferencia de nuevos sistemas de misiles antiaéreos Patriot, lo que allana el camino para que Berlín envíe dos sistemas a Ucrania. La promesa de Washington de reemplazar rápidamente los sistemas Patriot alemanes marca la primera vez que la administración Trump promueve activamente el suministro de armas a Ucrania.
Además, Kyiv planea firmar un acuerdo sobre drones con EE. UU., que implica la inversión estadounidense en la industria de defensa ucraniana. Esto incluye la compra por parte de EE. UU. de un gran número de vehículos aéreos no tripulados ucranianos. Asimismo, el Ministerio de Defensa ucraniano ha propuesto a sus socios internacionales el intercambio de drones de producción nacional por misiles Patriot. Se informa que los aliados se han comprometido a suministrar a Kyiv hasta 10 sistemas de defensa aérea Patriot.
Asimismo, Australia ya ha entregado la mayoría de los 49 tanques M1A1 Abrams prometidos, parte de un paquete de ayuda de 160 millones de dólares. Desde el inicio de la guerra a gran escala, Australia ha proporcionado a Ucrania 980 millones de dólares en asistencia militar.