En el primer semestre de 2025, la situación macroeconómica de Ucrania empeoró.


Los analistas sugieren que este declive se debe al agotamiento de los efectos de la recuperación tras el difícil año 2022, que se hizo evidente a principios del segundo trimestre del año pasado. En esencia, la economía ucraniana ha alcanzado su techo de crecimiento, incapaz de avanzar hacia una situación positiva sin cambios estructurales favorables.
La producción industrial en el primer trimestre cayó un 6,1% en comparación con el mismo período del año anterior, el volumen de obras de construcción se redujo un 11% y los precios de producción industrial aumentaron un 40,4%.
Mientras tanto, el volumen de productos industriales vendidos en Ucrania aumentó un 15,6% y las inversiones de capital aumentaron un 32,5%. Sin embargo, este crecimiento refleja principalmente un aumento nominal de la moneda nacional y una mayor inversión y producción en el sector de defensa. Además, factores externos han afectado negativamente a la economía, como la caída de los precios de varios productos de exportación ucranianos debido a conflictos arancelarios y la alta incertidumbre en el mercado global.
En consecuencia, el volumen de las exportaciones ucranianas en términos monetarios disminuyó un 7,4% en el primer trimestre, totalizando 9,9 mil millones de dólares.