El último paquete de armas de este año, valorado en 250 millones de dólares, y la confiscación de 300 mil millones de dólares en activos rusos congelados: así es como Estados Unidos apoya a Ucrania en la víspera de Año Nuevo.

El paquete incluye municiones para los sistemas NASAMS e HIMARS, misiles antiaéreos Stinger, proyectiles de artillería de 155 mm y 105 mm, misiles antitanques TOW y sistemas antitanques Javelin y AT-4. El paquete también incluye más de 15 millones de cartuchos para armas pequeñas, municiones explosivas, repuestos, equipos médicos y artículos de mantenimiento.

Este año, Estados Unidos proporcionó a Ucrania 34 paquetes de ayuda militar por un valor total de más de 24 mil millones de dólares.

Además, Estados Unidos ha propuesto a los grupos de trabajo del G7 que se estudien formas de confiscar 300.000 millones de dólares en activos rusos congelados. Los aliados de Ucrania tienen prisa por llegar a un acuerdo sobre un plan antes del segundo aniversario de la invasión rusa a gran escala de Ucrania (24 de febrero).

Como señala el Financial Times, a pesar de la falta de soluciones concretas y el acalorado debate en Europa, la aceleración del trabajo sobre este tema enfatiza la creciente importancia de Ucrania para Occidente. Tres grupos de trabajo propuestos por Washington estudiarán asuntos legales relacionados con la confiscación, métodos para aplicar dichas políticas, mitigación de riesgos y opciones sobre la mejor manera de brindar apoyo directo a Ucrania.