El próximo presidente de Estados Unidos probablemente centrará su atención en Asia, mientras que Europa se prepara para valerse por sí misma.

Los estados europeos se están preparando para un posible cambio en la política exterior de Washington con respecto a Ucrania y un debilitamiento de los lazos militares en caso de una victoria de Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Los aliados más cercanos de Estados Unidos en Europa anticipan una posible ruptura de las relaciones transatlánticas si Trump gana y son escépticos sobre su apoyo a Ucrania.

Los políticos, diplomáticos y analistas dicen que están mejor preparados para una posible segunda presidencia, lo que incluye una comprensión de los pasos diplomáticos que se necesitarían tomar y el desarrollo de varias estrategias de reacción que se pueden emplear en respuesta a cualquier cambio en la seguridad o el comercio.

Los funcionarios europeos creen que la candidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Kamala Harris, tenderá hacia las políticas del ex presidente Barack Obama, en lugar de Joe Biden, y cambiará el enfoque de Estados Unidos a favor de Asia.

«Independientemente de quién gane las elecciones estadounidenses, la atención futura de Estados Unidos se centrará cada vez más en la región del Indopacífico. Europa tendrá que hacer aún más por su seguridad», dijo Michael Stempfle, un representante del Ministerio de Defensa alemán.