El 23 de enero, Rusia atacó varias ciudades ucranianas, matando a 7 e hiriendo a 77.
Moscú lanzó ataques con cohetes contra Kiev, Járkov y Pavlograd, dirigidos a infraestructura civil. En estas ciudades se registraron siete muertos y al menos 77 heridos.
En particular, 22 víctimas resultaron heridas en la capital y dos edificios de gran altura, una casa particular y un automóvil fueron impactados en las afueras del distrito de Bucha, hiriendo a tres civiles.
Un cohete alcanzó un rascacielos residencial en Járkov, matando a cinco personas e hiriendo a más de 50.
En el ataque a Pavlograd, un hombre murió y al menos un ciudadano resultó herido.
Debido al mayor impacto de los ocupantes este invierno se ha producido un accidente en el gasoducto de Járkov. Naftogaz informa que el suministro de gas a los residentes de Járkov se reanudará poco después de que se realicen las reparaciones.
Además, 11.000 consumidores de la ciudad se quedaron sin electricidad. El enemigo dañó subestaciones transformadoras, un punto de distribución y líneas de cable.
Durante la noche y la madrugada del 23 de enero, los ocupantes lanzaron 41 cohetes.