China y Ucrania deberían compartimentar su relación económica, sin permitir que las sanciones del presidente Zelenskiy a las empresas chinas que invierten en Motor Sich envenenen los lazos comerciales y de inversión bilaterales más amplios, sostiene Zhao Huirong, escritor invitado del China Daily, propiedad del Partido Comunista Chino. “Las sanciones están dirigidas únicamente a las empresas involucradas en el acuerdo [de motores de avión], no a las que participan en proyectos conjuntos chino-ucranianos”, escribe Zhao, investigador de Europa del Este en la Academia China de Ciencias Sociales. «Zelenskiy no quiere dañar las relaciones entre China y Ucrania y, en cambio, busca forjar lazos comerciales más profundos con China». Sin embargo, advierte que las sanciones de Motor Sich «han reducido las posibilidades de un aumento sustancial de la inversión china en Ucrania y han llevado a los inversores potenciales a considerar los riesgos políticos en el país antes de invertir».