Además del ataque terrorista a la represa de Nova Kakhovka, Rusia atacó a Ucrania desde el aire.
La Fuerza de Defensa Aérea de Ucrania destruyó los 35 misiles de crucero lanzados por el agresor el 6 de mayo, pocas horas después de que los terroristas hicieran estallar la presa en la región de Kherson. La mayoría de los misiles X-101/X-555 volaron en dirección a la capital. Más de 20 cohetes enemigos fueron destruidos en el espacio aéreo alrededor de la capital. Como resultado del ataque, los escombros del cohete dañaron las líneas eléctricas en Kyiv y la región de Kyiv.
Además, el enemigo sigue aterrorizando las áreas del frente y de la frontera. Como resultado del bombardeo, se cortó la energía en áreas pobladas en las regiones de Donetsk y Sumy debido a las redes eléctricas dañadas. Según las autoridades locales, se cortó el suministro eléctrico a 11.000 viviendas.
Además, el ataque dejó sin electricidad a los consumidores de las regiones de Zaporizhia, Kharkiv, Kherson y Chernihiv.