Los costos de transporte inflados permiten que las empresas rusas ganen mucho más con la venta de petróleo crudo a la India de lo que se reconocía anteriormente. Según el FT, estas sobreestimaciones de costos podrían generar más de $1 mil millones por trimestre en ingresos.
Hasta hace poco, Rusia parecía estar cumpliendo con las restricciones occidentales diseñadas para reducir sus ingresos en respuesta a la invasión de Ucrania. Los productores de petróleo rusos vendieron sus productos a la India a un precio inferior a 60 dólares por barril. Pero cuando se tiene en cuenta el costo del flete, estos productores y comerciantes cobran cantidades mucho más altas.
Como descubrieron los analistas, estos cargos y comisiones adicionales recibidos del transporte de petróleo en buques conectados a Rusia podrían haber aportado a Moscú 1200 millones de dólares antes de julio.
El precio máximo impuesto por el G7 tiene como objetivo mantener el flujo de petróleo ruso mientras reduce los ingresos que financian la guerra. Pero esta restricción, que impone requisitos a los compradores, armadores y aseguradores de los países participantes, no limita los costos de flete.