Según un estudio del Instituto Anthony Blair, la remoción segura de minas en Ucrania requerirá 34.600 millones de dólares y una innovación extraordinaria. Al mismo tiempo, con el nivel actual de financiación y el uso de métodos tradicionales de desminado, se necesitarán más de 100 años para completarla. En la actualidad, unos 139.300 kilómetros cuadrados de tierra ucraniana están minados, es decir, una superficie mayor que Inglaterra.
Howard Buffett y Anthony Blair creen que esto es un enorme obstáculo para la recuperación y el desarrollo económico de Ucrania después de la guerra, y para la seguridad alimentaria mundial. Para lograr el objetivo del gobierno ucraniano de devolver el 80% de las tierras minadas a un uso productivo en un plazo de 10 años, la financiación debe aumentar a 2.800 millones de dólares anuales. Sin embargo, esta financiación no es la máxima prioridad de Ucrania en este momento.
Los analistas han estimado que el territorio minado cuesta a la economía ucraniana 11.200 millones de dólares en pérdidas de PIB anuales (el 5,6% del PIB del país antes de la guerra). Los investigadores creen que es posible atraer financiación a través del mercado de bonos agrícolas. Los pagos se realizarían utilizando los flujos de efectivo creados a partir de las tierras desmonteadas.