Tradicionalmente, en la segunda quincena de agosto se inicia la campaña de siembra de Comienzan los cultivos de invierno en las regiones del sur de Ucrania. Sin embargo, las previsiones sobre los resultados de la temporada son bastante pesimistas. En 2022, la superficie de cultivo de cereales de invierno ascendió a 4,5 millones de hectáreas. En 2021, la última temporada completa antes de la invasión a gran escala, la superficie plantada de cultivos de invierno superó los 6,5 millones de hectáreas.
Cabe señalar que, según las previsiones, la superficie plantada disminuirá aún más este año en 1–1,5 millones de hectáreas. Las principales razones de la reducción de los volúmenes de producción: escasez de capital de trabajo entre los productores agropecuarios, ocupación de territorios y minería, colapso de la logística de exportación tras la suspensión del corredor de granos, y bajos precios de compra por el alto costo logístico. Como resultado, se producirán de cinco a seis millones de toneladas de trigo y cebada, o casi un tercio de los resultados del año en curso.