El presidente Zelenski dijo que Ucrania está creando plantas subterráneas de producción de armas que podrán abastecer a las Fuerzas Armadas en caso de que se retrase la ayuda militar de los socios occidentales.
Al mismo tiempo, Ucrania está desarrollando varios medios nuevos para contrarrestar los drones rusos con el fin de no gastar costosos misiles antiaéreos para destruirlos. El país ya utiliza pequeños drones que han sido modificados para el combate aéreo. Cada semana, estos drones interceptan aproximadamente 50 UAV rusos.
Otra herramienta potencial para combatir los drones rusos son los UAV alados, que pueden seguir a los drones enemigos a una distancia de hasta 60 km y una altitud de hasta 4 km. Los drones de este tipo ya se están probando y deberían ser suministrados al ejército este año.
Además, se está trabajando en drones asesinos de largo alcance, que son UAV que pueden destruir los drones del tipo Shahed utilizados por Rusia. Para que estos interceptores sean eficaces, deben tener una velocidad de al menos 200 kilómetros por hora, un alcance operativo de al menos 200 kilómetros y ser económicos. Ucrania planea construirlos a fines de 2025.