Según la viceprimera ministra Olga Stefanishyna, desde la guerra la integración se ha convertido en uno de los elementos clave de la estrategia de supervivencia del país. La UE abrió sus fronteras para proporcionar refugio a los ucranianos y se ha convertido en el actor principal en el movimiento de productos ucranianos en el extranjero y la provisión de ayuda humanitaria y de otro tipo a Ucrania. La liberalización del comercio también ha ayudado significativamente a las empresas ucranianas. Como resultado, durante los ocho meses de guerra, la exportación de mercancías a la UE ha aumentado un 6%. Stefanishyna aclaró que Ucrania ha cumplido con el 65% de las obligaciones estipuladas en el Acuerdo de Asociación. “En 2023, planeamos sentar las bases y comenzar el proceso de negociación sobre la membresía. Paralelamente al cumplimiento de las condiciones políticas, concluiremos acuerdos adicionales que nos permitirán eliminar las barreras económicas y sociales entre Ucrania y la UE”, agregó Stefanishina.