Durante una visita a la Casa Blanca el 9 de febrero, el canciller alemán Olaf Scholz discutió una mayor ayuda a Ucrania con el presidente estadounidense Joe Biden, y ambos líderes pidieron al Congreso estadounidense que aprobara fondos adicionales para Ucrania lo antes posible.
Antes de la reunión, Biden dijo a los periodistas que el Congreso sería culpable de «negligencia casi criminal» si no aprobaba una decisión sobre la financiación de Ucrania. Agradeció a Scholz por su liderazgo para conseguir ayuda militar para Kiev en Alemania.
La canciller alemana, por su parte, recordó la reciente decisión de los líderes de la UE de aprobar 50 mil millones de euros en ayuda financiera a Kiev y la decisión de Alemania de aumentar la ayuda militar. Scholz subrayó que últimamente Alemania ha contribuido decisivamente al apoyo a Ucrania.
«Ahora, lo mismo debería suceder en el resto de Europa y Estados Unidos», afirmó.
La víspera, Scholz se reunió con senadores estadounidenses de ambos partidos, quienes le aseguraron que el Congreso comprende la necesidad del apoyo continuo de Ucrania.