Según el canciller alemán Olaf Scholz, no habrá un final rápido para la guerra que la Federación Rusa inició contra Ucrania. Por ello, instó a la comunidad internacional a estar preparada porque aún cuando termine la guerra no todo se normalizará de inmediato.
Al mismo tiempo, enfatizó que «no hay necesidad de detener los esfuerzos para poner fin a la guerra» y «un requisito previo para el establecimiento de la paz es la retirada de Rusia de sus tropas de Ucrania».
Además, la canciller ha subrayado que esta guerra tendrá consecuencias a largo plazo que mantendrán en tensión a la UE y al mundo, tras lo cual habrá que esperar mucho tiempo para «sacar los escombros».