Los precios mayoristas de alimentos cayeron por duodécimo mes consecutivo debido a las menores cotizaciones mundiales de cereales y aceites vegetales.
El índice de precios de los alimentos de la FAO en marzo de 2023 fue de 126,9 puntos, un 2,1% menos que el mes anterior y un 20,5% por debajo del nivel máximo de marzo de 2022, según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. La supresión de la demanda de importaciones y la continuación de la Iniciativa de Granos del Mar Negro contribuyeron a la caída de los precios, señaló la organización.
Sin embargo, a pesar de la caída a nivel mundial, los precios en los mercados internos siguen siendo muy altos y continúan aumentando, creando desafíos adicionales para la seguridad alimentaria. En primer lugar, esto afecta a los países en desarrollo ya los que son importadores netos de alimentos. La FAO dice que la situación se ve agravada por la devaluación de las monedas de estos países y la creciente carga de la deuda.