El primer ministro de los Países Bajos, Mark Rutte, vino a Járkov el 1 de marzo para firmar un acuerdo de seguridad bilateral con Ucrania. El acuerdo prevé 2.000 millones de euros en ayuda militar en 2024 y más ayuda de defensa durante los próximos 10 años.
El documento define las prioridades de asistencia en materia de defensa aérea, artillería, naval y medios de largo alcance, haciendo especial hincapié en el fortalecimiento de la Fuerza Aérea. También formaliza la posición de principios de los Países Bajos sobre el fortalecimiento de las sanciones contra Rusia, obligándola a compensar a Ucrania por los daños que ha causado y llevar al agresor ante la justicia. Los Países Bajos también apoyan la futura membresía de Ucrania en la UE y la OTAN.
El documento también define el mecanismo de respuesta de emergencia de 24 horas en caso de repetidas agresiones militares contra Ucrania.
Rutte también anunció que Países Bajos proporcionaría a Ucrania 22 patrulleras militares, tres buques de guerra y al menos nueve obuses, además de destinar un total de 250 millones de euros a la iniciativa checa de compra de munición para Ucrania (los Países Bajos habían comprometido previamente 100 millones de euros).