Este verano, los comerciantes europeos han contratado sólo una pequeña parte de la capacidad de almacenamiento de gas de Ucrania tras los ataques rusos. El Financial Times señala que el aumento del riesgo y la falta de incentivos de precios han reducido el atractivo de las instalaciones ucranianas.
Según Argus, en junio y julio las empresas europeas enviaron a los depósitos de gas de Ucrania 15,4 millones y 51,9 millones de metros cúbicos respectivamente, frente a 102,7 millones y 586,6 millones de metros cúbicos en junio y julio de 2023. Aunque los depósitos de gas se encuentran a gran profundidad, los daños a las instalaciones de inyección en superficie es un riesgo importante que preocupa a los comerciantes.
«El principal problema no es la pérdida de gas, sino la imposibilidad de extraerlo cuando se necesita y hay demanda», explica el grupo energético Axpo.
Por su parte, Naftogaz afirma que la inyección y extracción de gas por parte de comerciantes extranjeros se realiza con normalidad. Admitieron que los ritmos de bombeo han disminuido un poco, pero el año pasado el pico de bombeo cayó exactamente de agosto a septiembre, y la temporada duró hasta octubre.