Dos tercios (66%) de los activos puestos a privatización desde principios de 2023 fueron comprados por representantes de pequeñas y medianas empresas, informó el Fondo de Bienes del Estado.
Las empresas inmobiliarias se convirtieron en el segundo mayor grupo de inversores, comprando el 12% de los activos privatizados. Otro 7% pertenece a empresas del ámbito del comercio minorista y la distribución. Empresas industriales, agrícolas, logísticas y de restaurantes también han invertido en activos estatales.
En total, 50 objetos han recibido nuevos propietarios desde principios de año. Estos fondos ya se han asignado al presupuesto y se han firmado contratos de venta.