La operación de Crimea incluirá ataques aéreos, terrestres y marítimos con comandos ucranianos que utilizarán tecnología para socavar y paralizar a las tropas rusas. Más de 2.000 soldados han llegado a un lugar remoto de Dartmoor para participar en ejercicios especializados. En otros lugares, las unidades blindadas atravesarán las defensas, con operaciones respaldadas por un nuevo stock de misiles de largo alcance suministrados por el Reino Unido, EE. UU. y Alemania.
El entrenamiento se lleva a cabo en Battle Camp en Okehampton, Devon, que se ha cerrado a todas las demás unidades militares y miembros del público. Las fuentes dicen que formarán la punta de la lanza en una invasión, mientras que otras dos fuerzas montan ataques simultáneos.
El sábado por la noche, el jefe de inteligencia ucraniano, Kyrylo Budanov, confirmó que las fuerzas entrarían en Crimea “pronto”. El sábado por la noche, una fuente militar de alto rango del Reino Unido dijo que se estaba poniendo énfasis en el uso de tácticas ágiles de la OTAN para ayudar a las tropas ucranianas a “dar forma al espacio de batalla” antes de atacar el corazón del enemigo.