En junio, las empresas volvieron a evaluar negativamente los resultados de su actividad. Según el BNU, el índice de actividad de las expectativas empresariales disminuyó a 43,6 desde 48 en mayo. El aumento de los costos debido a la escasez de electricidad y los aumentos de tarifas, la débil demanda de inversión y una escasez significativa de trabajadores calificados influyeron en el deterioro de las expectativas en todos los sectores.
Las empresas industriales redujeron sus estimaciones sobre los resultados de sus actividades en el futuro próximo: el índice del sector en junio fue de 45,5 (en mayo, 48,8). Las empresas comerciales también mantuvieron expectativas negativas: el índice – 46,4 (en mayo, 47,7). Las empresas de construcción debilitaron significativamente sus calificaciones debido a la débil demanda de inversión, los cortes de energía prolongados y la falta de trabajadores calificados: el índice del sector fue 43 (en el mes anterior – 49,8).
Por segundo mes consecutivo, las empresas del sector servicios dieron la evaluación más moderada de su actividad económica y empeoraron sus expectativas sobre las perspectivas económicas: el índice cayó a 39,7 desde 47,2 en mayo.
Los directivos de empresas de todos los sectores esperan una reducción del número total de empleados, sobre todo en el sector de servicios.