El gobierno alemán cree que los daños en el gasoducto Nord Stream-2 imposibilitan su operación, informó DW. «El acto de sabotaje con poderosas explosiones probablemente tuvo consecuencias negativas para ambos hilos, por lo que su uso técnico es actualmente imposible», dice la respuesta del gobierno federal a la solicitud oficial del jefe adjunto de la facción de derecha Alternativa para Alemania, Leif-Eric Holm. El gobierno también señala que el gasoducto nunca recibió la certificación necesaria y, por lo tanto, no puede ser puesto en marcha en ningún caso. Holm afirmó que tras el sabotaje la coalición gobernante formada por el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), el Partido Verde y el Partido Democrático Libre espera que se haya descartado el tema de los suministros a través de Nord Stream 2.