Según el presidente checo, Petr Pavel, a Praga solo le quedan unas pocas opciones para un mayor apoyo militar a Kyiv. Afirma que la República Checa ya ha enviado todas las armas que pudo a Ucrania. Pero todavía hay oportunidades de asistencia en defensa aérea y municiones.
Pavel también sugiere que en 2024 el apoyo de los aliados de Ucrania puede debilitarse significativamente. Señala que EE. UU. celebrará elecciones presidenciales en 2024, lo que significará un enfoque en la política interna. Dijo que si el apoyo de Estados Unidos disminuye, también disminuirá el apoyo de varios países europeos.
El presidente de la República Checa asume que en 2024 Ucrania ya no podrá iniciar operaciones grandes y complejas, por lo que este año es crucial para el desarrollo de la guerra.