Rusia está aumentando la producción militar, acumulando armas y municiones estándar, y es probable que pueda sostener una ofensiva en Ucrania durante los próximos dos años. Al hacer la transición de su economía hacia un enfoque militar, obligando a las empresas a trabajar horas extras para producir o reparar armas viejas y comprando repuestos a Irán, China y Corea del Norte, Rusia se ha recuperado notablemente de sus pérdidas iniciales en Ucrania, señala el WP.
«Rusia no produce equipos militares modernos, pero produce armas mucho más simples, rifles, proyectiles y armas masivas para soldados comunes», dice el economista ruso Nikolai Kulbaka.
El armamento de la era soviética, incluidos misiles y bombas guiadas, compensa la incapacidad de Rusia para desarrollar y desplegar armas avanzadas.
Al mismo tiempo, según la inteligencia británica, Rusia ya ha perdido al menos 100 de sus aviones de combate.
Sin embargo, según Christopher Cavoli, jefe del Comando Europeo de Estados Unidos, Moscú tiene ahora más soldados que al comienzo de la guerra, y se están adaptando rápidamente a los desafíos del campo de batalla, tanto táctica como tecnológicamente.