La directora del BERD, Odile Renaud-Basso, en respuesta a las críticas, calificó el apoyo de Occidente a Ucrania como «enorme» en términos de la proporción de apoyo procedente del PIB y señala que eclipsa el Plan Marshall (el plan de los EE.UU. de reconstrucción europeo tras la Segunda Guerra Mundial).
Bruselas y Washington fueron los mayores donantes financieros de ayuda no militar a Ucrania, proporcionando 27.500 millones de euros y 22.900 millones de euros, respectivamente, durante el intervalo entre la invasión rusa en febrero de 2022 y finales del año pasado.
«El hecho de que Ucrania haya recibido el 50% de su presupuesto a través de apoyo externo es enorme», insiste Renaud Basso.
El funcionario también rechaza las críticas de algunos partidarios de Ucrania de que el paquete de ayuda de la UE (50 mil millones de euros hasta 2027) es insuficiente en comparación con el presupuesto de siete años de la UE, que asciende a 1.074 billones de euros. Según ella, los dirigentes de la UE deben equilibrar una delgada línea entre el apoyo a Ucrania y la financiación de las prioridades internas.
Por su parte, el BERD ha aumentado su capital en 4.000 millones de euros para reforzar el apoyo a Ucrania.