El gobierno irlandés planea reducir la ayuda a los refugiados ucranianos recién llegados a 38,8 euros por semana en comparación con los 232 euros por semana actuales. El cambio no afectará a unos 103.000 ucranianos que ya se encuentran en Irlanda.
Los nuevos refugiados ucranianos también reciben formación y apoyo para ayudarles a encontrar trabajo. Los nuevos refugiados ucranianos también recibirán 90 días de vivienda pública gratuita, después de los cuales serán responsables de encontrar alojamiento ellos mismos.
Mientras tanto, el gobierno escocés, que el año pasado proporcionó 10 millones de libras esterlinas para cubrir los costos de alojamiento temporal de los refugiados, ha dicho a las autoridades locales que ya no proporcionará la financiación. Como resultado, los ayuntamientos de las ciudades escocesas han dejado de pagar a los ucranianos para que vivan en hoteles.
El año pasado, Alemania asignó 50 millones de euros para mejorar las condiciones de vivienda de los desplazados internos del este de Ucrania. La iniciativa correspondiente proporcionó viviendas de alquiler asequibles a largo plazo.