Representantes de Ucrania y Francia inspeccionaron las consecuencias del reciente ataque ruso al Nuevo Confinamiento Seguro, o Arca, una estructura protectora que encierra la cuarta unidad del reactor de la central nuclear de Chornóbyl, diseñada y construida por un consorcio francés. Actualmente, los socios franceses están explorando la posibilidad de apoyar la restauración del Arca a través de la Cuenta de Cooperación Internacional para Chornóbyl. Se está evaluando la magnitud de los daños y se está desarrollando un plan para restablecer su funcionalidad.
Pierre Elbron, enviado especial del presidente francés para la asistencia y reconstrucción de Ucrania, cree que la Zona de Exclusión de Chornóbyl ofrece oportunidades para proyectos de energía renovable.
«Estoy interesado en explorar iniciativas de energía solar. Mi visita a Chornóbyl nos ayudará a comprender mejor cómo aprovechar el potencial de la Zona de Exclusión para satisfacer las necesidades energéticas de Ucrania», declaró.
Elbron enfatizó que Ucrania y Francia comparten un equilibrio energético similar entre la energía nuclear y las renovables, considerándolas la base de la seguridad energética de Europa.