Bratislava vende activamente armas a Ucrania a pesar de que el actual primer ministro, Robert Fico, llegó al poder criticando a sus oponentes políticos por ayudar a Ucrania. Fico calificó a sus rivales políticos de peones de guerra y a sí mismo como el principal partidario de la paz, y durante la campaña electoral del año pasado dijo que no daría a Ucrania «ni una sola bala».
Sin embargo, según la revista eslovaca SME, las estadísticas de exportación indican que Bratislava no solo no ha reducido el volumen de suministros militares que envía a Ucrania, sino que ha vendido más armas que los gobiernos anteriores.
«Incluso antes de las elecciones, Fico sabía que al prohibir los suministros comerciales, destruiría la reputación internacional del Estado eslovaco y de los fabricantes privados de armas», señaló la publicación.
Sin embargo, Fico planea convencer a Ucrania de que no detenga el tránsito de gas después de que expire el acuerdo con la rusa Gazprom a fines de 2024.
«Tanto Eslovaquia como Ucrania se beneficiarían de esto debido a una tarifa de tránsito», dice Fico, evitando mencionar el gas ruso.