Según el Servicio Estatal de Estadística, en julio la inflación no aumentó, pero los economistas creen que en agosto y los meses siguientes será diferente. La situación es desequilibrada porque las empresas están invirtiendo en generadores debido a los apagones masivos.
\Por lo tanto, los precios subirán, ya que generar electricidad de esta manera es mucho más caro que con fuentes tradicionales. También afectan a los precios los problemas logísticos y la necesidad de almacenar los productos en almacenes frigoríficos. Según las previsiones, la inflación también aumentará en septiembre y los meses siguientes debido al aumento de impuestos que se espera que apruebe el parlamento, las tarifas de los servicios públicos y los impuestos especiales sobre el combustible, el tabaco y las bebidas gaseosas dulces.
Los productos alimenticios se encarecerán a partir de finales de septiembre debido a un posible aumento de los precios de las materias primas para las empresas procesadoras. Por ejemplo, los precios de compra de la leche ya han aumentado un 30%. La situación es similar con los cereales, cuyo crecimiento también es del 20-30%.