Su objetivo es crear un sistema transparente de uso del subsuelo, reducir la influencia estatal excesiva en la industria, aumentar la competencia y legalizar las relaciones en el campo del uso del subsuelo. La ley permite la presentación de documentos e informes en forma electrónica a través de un gabinete electrónico, incluyendo el inicio de presentaciones de nuevos lotes a subastas electrónicas. También se propone reemplazar el estudio geológico actual por un permiso especial complejo por un plazo de 3 a 20 años, que permitirá combinar la exploración de minerales con su extracción. La ley también propone reducir a la mitad la lista de documentos del paquete para otorgar un permiso especial y prevé la creación de un sistema de información único para el uso del subsuelo.