Esta semana, el Parlamento Europeo se prepara para adoptar una resolución que pide medidas más «selectivas» contra la flota en la sombra de la Federación Rusa. La continua evasión de sanciones por parte de Rusia genera ingresos y crea el riesgo de un desastre ambiental. El Parlamento Europeo insiste en la «sanción sistemática» de los barcos que transportan petróleo ruso y pide a la UE que refuerce la vigilancia por satélite y las «inspecciones selectivas» de los petroleros. Otras propuestas incluyen nuevos requisitos para que los buques muestren una prueba de seguro en aguas de la UE.
Rusia utiliza cada vez más una flota de más de 600 petroleros viejos con una cobertura de seguro y una propiedad inciertas para transportar su crudo por todo el mundo, lo que representa casi la mitad de los ingresos del Kremlin. En Occidente están creciendo los temores de que estos viejos petroleros puedan provocar un desastre ambiental cerca de la UE después de que los informes de los medios de comunicación del mes pasado vincularan a la flota en la sombra con numerosos derrames de petróleo.
Los miembros del Parlamento Europeo afirman que el bloque debe «garantizar la preparación suficiente» para que el petróleo entre en sus aguas.