Los ataques de las fuerzas ucranianas contra objetivos en territorio ruso pueden afectar a todas las operaciones ofensivas de Rusia en Ucrania, señaló el ISW, después de los recientes ataques a un almacén que contenía drones Shahed en la región de Krasnodar y en la República de Adiguesia.
«Las fuerzas rusas dependen de los drones Shahed para atacar tanto los asentamientos y ciudades ucranianos de primera línea como de retaguardia y gastan alrededor de 10.000 proyectiles de artillería por día en posiciones ucranianas de primera línea», dice el resumen.
En septiembre y octubre, el ejército ucraniano atacó depósitos de municiones y misiles, destruyendo docenas de edificios de almacenamiento de municiones, vagones de ferrocarril y cantidades significativas de municiones, misiles y drones.
Los ataques de largo alcance en el interior de Rusia con armas occidentales permitirían al ejército ucraniano explotar de manera más efectiva esos lugares vulnerables en territorio enemigo antes de que Moscú pueda recurrir a contramedidas.
Además, la inteligencia estonia señaló que los ataques ucranianos a los depósitos de municiones aumentarán el «hambre de proyectiles» de Rusia.