El nuevo oleoducto conectará los puertos de Odesa en Ucrania y los puertos de Gdansk en Polonia. Según TVP.info, la dirección de Orlen ha vuelto al proyecto del oleoducto Odesa-Brody-Plock-Gdansk, una vez suspendido.
En 2004, Polonia y Ucrania crearon una empresa conjunta para implementar este proyecto. Rusia, gobernada por el presidente Putin, quería que Europa dependiera de las materias primas de su país y tomó medidas para evitar que se completara el proyecto del oleoducto Ucrania-Polonia. En pocos años, el proyecto fue revivido por el entonces presidente de Polonia, Lech Kaczyński. Sin embargo, tras su muerte en 2010, el gabinete del entonces primer ministro polaco, Donald Tusk, decidió renovar las relaciones con Rusia. El plan para construir el oleoducto comenzó a ser cuestionado, con varios ministros cuestionando su rentabilidad. El proyecto finalmente se detuvo a fines de 2013.
Después de la invasión rusa de Ucrania, Varsovia comenzó a considerar reactivar el plan de oleoductos que une Ucrania y Polonia.