Según EBA, la NBU actualmente entiende que las restricciones monetarias están agotando gradualmente su función y la situación macroeconómica en el país se está estabilizando. Debido a esto, el regulador está trabajando activamente en el desarrollo de su Estrategia de Liberalización de Moneda. Se construirá como un plan por etapas, implementado a medida que se formen los requisitos previos necesarios, sin estar atado a plazos específicos. También se discutirá con el FMI durante su misión a fines de mayo.
Además, la tasa de descuento podría reducirse en el cuarto trimestre al 21%. También entre las prioridades se encuentran la eliminación de restricciones en el uso de tarjetas de pago corporativas y la provisión de garantías bancarias para la participación de empresas en licitaciones para la reconstrucción de Ucrania.
“Los próximos pasos en la estrategia son aliviar las restricciones para las transferencias transfronterizas, el pago de intereses de los eurobonos, etc.”, aclaró la EBA.