Esta propuesta fue expresada por el Ministro de Alimentación y Agricultura de Gran Bretaña, Mark Spencer, en la conferencia del Consejo Internacional de Cereales en Londres. Agregó que Gran Bretaña está liderando este esfuerzo y que los países del G7 están trabajando de cerca con Ucrania, el cuarto mayor exportador de granos del mundo.
«Consideramos que la identificación química es un medio efectivo para prevenir más robos de granos ucranianos», dijo el ministro británico.
Según estimaciones de la Asociación de Granos de Ucrania, desde que comenzó la guerra, la Federación Rusa ha robado alrededor de cuatro millones de toneladas de cereales ucranianos y está tratando de venderlos en el extranjero. Los principales compradores son países bajo sanciones.
El mes pasado, Gran Bretaña anunció nuevas sanciones contra Rusia dirigidas a «individuos y organizaciones sospechosas» vinculadas al presunto robo de grano ucraniano.