Los ministros de finanzas del G7, reunidos en Italia, apoyaron la idea de Estados Unidos de conceder a Ucrania un préstamo garantizado con los beneficios de los activos rusos congelados. El préstamo de 50.000 millones de dólares se reembolsará mediante las ganancias de unos 190.000 millones de euros en activos pertenecientes al Banco Central de Rusia. Sin embargo, los detalles del préstamo aún no se han acordado completamente. Sin embargo, los líderes del G7 presentarán algunas opciones para construir la estructura de préstamos antes de la cumbre de junio.
El presidente del Banco Mundial, Ajay Banga, dijo que está abierto a gestionar el fondo de crédito del G7 para Ucrania.
Mientras tanto, Hungría ha bloqueado la canalización de los beneficios de los activos rusos por parte de la UE hacia la compra de armas para Ucrania. A Hungría se le ofreció la opción de que su parte de los fondos no se utilizara para armas. Esto ha convencido a Budapest de no vetar el plan, pero está retrasando su implementación al no apoyar la legislación necesaria. Los diplomáticos esperan que estos problemas se resuelvan antes del pago previsto para julio.