El Fondo Monetario Internacional está preparado para ayudar a los países que puedan sufrir los efectos secundarios del conflicto ruso-ucraniano y las sanciones impuestas por los gobiernos occidentales a Rusia. Así lo anunció el miércoles la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, informó ed Reuters. «Si nos encontramos en una situación en la que hay efectos indirectos que requieren una mayor participación del FMI para otros países, por supuesto que estaríamos allí. Todavía tenemos una capacidad crediticia de alrededor de US$700.000 millones», dijo Georgieva.