En particular, el Fondo Monetario Internacional espera una disminución en las exportaciones de cereales de Ucrania debido a las malas cosechas y los campos minados. Se prevé que el volumen de las exportaciones de cereales de Ucrania disminuya al 60% del nivel anterior a la guerra para 2024. Y las posibles interrupciones con la iniciativa de cereales y las restricciones a la importación en la UE amenazan con causar pérdidas de hasta 800 millones de dólares cada mes.
Por lo tanto, el FMI cree que la prioridad a corto plazo es fortalecer y diversificar los canales comerciales, mientras que la recuperación a largo plazo requerirá resolver el problema del desminado de tierras agrícolas, ya que se deben inspeccionar y limpiar aproximadamente 2,5 millones de hectáreas de tierras agrícolas.